El nombre Allesverloren refleja el origen de sus vinos. Surge de un único incidente transformador: para comprar...
- No hay más artículos en su carrito
- Transporte
- Total € 0,00
Kopke
Kopke 1636
La trayectoria de Kopke como viticultor está entrelazada con la historia de su lugar. El Duero estaba predestinado y se ha convertido en la elección elegida por la colaboración del hombre y la naturaleza para hacer Puerto
Un viaje en 1636 entre Hamburgo y Portugal es el comienzo de una larga historia: Nicolau Kopkë se instala en Portugal como cónsul general de la Liga Hanseática. Dos años más tarde, en 1638, se enviaron las primeras botellas de vino al norte de Europa.
La compra de una finca en el Duero, en 1781, marca la transición de una empresa compradora de vino a un gran productor.
El vino de Oporto poco a poco se convierte en el foco de la empresa y pronto representa la actividad principal. Nicolau Kopkë & Co. es un modelo de innovación y produce y comercializa sus vinos dentro de la misma empresa.
En 1828, Cristiano Nicolau Kopkë, bisnieto del fundador de la empresa Nicolau Kopkë y nieto de Cristiano Kopke , se puso del lado del Partido Liberal durante la guerra civil, vinculando a la empresa y a la familia al negocio.
Este compromiso con el concepto de progreso social será compartido por todas las generaciones sucesivas de la familia.
Kopke 1836
En 1836 fue honrado con el título de Barón de Vilar y diez años más tarde su primo Joaquim Augusto Kopke fue nombrado Barón de Massarelos. Dos siglos después de la llegada de la familia a Portugal, su compromiso con el desarrollo del país se vio recompensado.
En 1841 la empresa cambió su nombre a CN Kopke y así sigue siendo hasta el día de hoy.
Quinta de São Luiz fue adquirida en 1922 y desde entonces se ha convertido en el lugar donde se producen todos los vinos DOC Douro de Kopke .
Los grandes conocedores de los vinos del Duero siempre han reconocido esta finca como una de las más importantes de la región, por la calidad de su suelo y viñedos y por sus tradiciones culturales.
Durante años, una de estas tradiciones fue pintar de blanco las paredes de piedra de la Quinta una vez al año. Estas paredes blancas son piezas de historia que se conservan hasta el día de hoy y subrayan de manera única el paisaje del Duero.
Kopke 1940
En 1940 se firma el certificado de la Asociación Comercial e Industrial Portuguesa que menciona las antigüedades de CN Kopke hasta 1638.
En los próximos siglos, Kopke se esforzará por honrar su legado, construido con pasión a lo largo de generaciones.